JudicialMontería

Dolor en La Granja por la muerte de un niño de 4 años

María Caro, residente en el barrio La Granja de Montería,  nunca se imaginó que un dolor de estómago sería el detonante para que su pequeño hijo de 4 años muriera intempestivamente.

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El pasado domingo 11 de septiembre se acercó junto a su bebé al CAMU La Granja; su pequeño hijo llevaba horas con un dolor de estómago y pensó que en este centro de salud lograrían quitarle el dolor y hacerle los exámenes médicos.

No obstante y después de que -supuestamente- la administraran el medicamento Ondansetrón, el pequeño se descompensó, comenzó a convulsionar, hasta que finalmente murió.

Para la madre, se trata de un caso de negligencia médica y ante la Fiscalía, acusó al cuerpo médico que atendió al niño de homicidio. Asegura que la enfermera le dijo que al niño le administrarían Acetaminofén y un suero, jamás le mencionaron otro medicamento, además de eso, fue enfática en decir que ningún médico se acercó y le dio la cara para explicarle qué estaba pasando con su hijo: “Sólo me decían, está inconsciente pero estable, al rato me dijeron que iban a entubar y minutos después me dijeron que había muerto”.

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CAMU NIEGA NEGLIGENCIA

En este sentido, el jefe médico de la ESE VidaSinú, Marcos Tamara, descartó la negligencia médica y aseguró que la atención fue oportuna.

Indició que el niño ingresó por urgencia a las 7:16 de la noche de ese domingo 11 y luego pasó por observación, aunque dos horas después falleció: “Esperamos el resultado de la necropsia, queremos aclarar las causas de la muerte del menor, pero negligencia no fue”, expresó.

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“No queríamos que esto pasara, son los designios de Dios”, insistió.

Tamara añadió que el medicamento que se le suministró al menor tiene muy pocos efectos secundarios y no requería hacerle una prueba, no obstante, admitió que cuando el niño llegó no estaba en estado crítico, sólo se llevó a observación para su chequeo.

Indicó que se le dio manejo conforme a la información que suministró la madre, que venía con una fiebre intermitente desde el pasado 5 de septiembre y ese domingo había vomitado, no obstante, aclaró que el niño no tenía muestras de deshidratación.

Mientras el CAMU espera por la necropsia para demostrar que todos los protocolos de atención se cumplieron, una madre llora la inesperada muerte de su primer hijo, a quien ingresó caminando al centro médico y este lunes lo sacó en un ataúd.

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