Petro aclara: “El problema es con Trump, no con los Estados Unidos” tras críticas sobre posible enemistad con Washington

El presidente Gustavo Petro volvió al centro del debate internacional tras responder públicamente al periodista Juan Carlos Botero, quien en una reciente columna afirmó que el mandatario “finalmente logró lo que tanto quería: una declaratoria oficial de enemistad de parte de Estados Unidos”.
Botero sostuvo que esa supuesta ruptura podría traer “altos costos para el pueblo colombiano”, al insinuar un deterioro en las relaciones diplomáticas entre ambos países.
“El problema es con Trump, no con los Estados Unidos”
La respuesta del presidente no se hizo esperar. A través de su cuenta en X (antes Twitter), Petro aclaró que no existe enemistad alguna con la nación norteamericana, y que sus diferencias se centran exclusivamente en el expresidente republicano Donald Trump.
“Yo respeto la historia, la cultura y los pueblos de los EEUU. No son enemigos míos, ni los siento así.”
“El problema es con Trump, no con los EEUU.”
Con esa frase, el mandatario buscó marcar distancia entre su crítica a figuras políticas estadounidenses y la relación institucional entre ambos países. En el mismo mensaje, añadió una reflexión histórica:
“Simplemente Trump no comprende cómo pudieron millones de jóvenes norteamericanos ir a pelear por lo que parecía una causa ajena: la guerra en Europa. Allá lucharon y murieron muchos, esos jóvenes sí sabían por qué luchaban. Luchaban por la humanidad. El concepto de lo humano, Trump no lo entiende.”
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Las palabras de Petro llegan en un momento en que las relaciones con Estados Unidos atraviesan episodios de fricción, especialmente por los cambios en la política antidrogas, las posturas frente al conflicto en Gaza y la cercanía del gobierno colombiano con otros países latinoamericanos críticos de Washington.
Sin embargo, el mandatario insistió en que sus declaraciones no significan un distanciamiento del pueblo estadounidense ni de su gobierno actual, sino una diferencia ideológica con Trump, quien representa —según Petro— una visión contraria a los valores humanistas.