Nombramiento en la Unidad de Víctimas genera cuestionamientos por cercanía con testigo clave en caso Benedetti
El reciente nombramiento de María Margarita Vega Otero como directora territorial de la Unidad para la Atención y Reparación de Víctimas en Urabá ha empezado a generar inquietudes en distintos sectores, luego de conocerse que la funcionaria es esposa de Héctor Julio Álvarez Rivero, testigo clave en el proceso que enfrenta el ministro del Interior, Armando Benedetti, ante la Corte Suprema de Justicia.
Aunque su posesión, realizada a mediados de octubre, pasó desapercibida, el contexto político y judicial que rodea a Vega Otero ha encendido las alarmas. Su esposo, Álvarez Rivero, es considerado por la Corte como el “garganta profunda” en el caso de presunto desfalco a Fonade, investigación por la cual Benedetti fue llamado a juicio. Su colaboración con la justicia ha sido determinante, al punto de que en abril pasado el Juzgado 47 Penal Municipal de Bogotá le prorrogó por un año más el principio de oportunidad que mantiene con la Fiscalía.
El ascenso de Vega Otero en el actual gobierno no es nuevo. Entre octubre de 2023 y agosto de 2025, fue contratista de la Autoridad Nacional de Acuicultura y Pesca (Aunap). Luego, en octubre de este año, fue designada como directora territorial de la Unidad de Víctimas, cargo estratégico en una región con fuerte presencia institucional y cercanía al departamento de Córdoba.
Las entidades donde ha trabajado Aunap y la Unidad de Víctimas han tenido históricamente conexiones con sectores políticos del Partido de la U, colectividad a la que Benedetti perteneció hasta hace un par de años, lo que ha aumentado la atención sobre este nuevo nombramiento.
Héctor Julio Álvarez, ingeniero civil y oriundo de Chinú, mantiene además un pasado político cercano a la casa del exsenador Musa Besaile Fayad. Su trayectoria incluye cargos en Fonade desde 2016, tras su paso por la Secretaría de Infraestructura Departamental de Córdoba (2012-2013) y la Dirección de Bienes Públicos Rurales del Ministerio de Agricultura.
Mientras avanza el juicio contra Benedetti y continúan las investigaciones relacionadas con el desfalco a Fonade, el nombramiento de Vega Otero despierta dudas sobre eventuales conflictos de interés en una de las entidades más sensibles para la atención de víctimas del conflicto armado en Colombia.
