Reaparición de Emilio Tapia en Barranquilla reaviva la polémica por su libertad condicional

Pocos días después de recuperar la libertad, el contratista Emilio Tapia volvió a ser visto en público en la ciudad de Barranquilla, en un hecho que reavivó la controversia alrededor del beneficio de libertad condicional que le fue concedido recientemente por un juez.
La aparición se registró en un centro comercial del norte de la ciudad, donde Tapia se movilizaba con un llamativo esquema de seguridad conformado, según testigos, por al menos tres camionetas y dos uniformados de la Policía. El contratista estaba acompañado por su pareja, la representante a la Cámara por Córdoba, Saray Robayo, quien en días recientes anunció el aplazamiento de su aspiración al Senado para atender asuntos familiares.
Tapia recuperó la libertad el pasado 15 de diciembre, tras una decisión adoptada por la jueza primera de ejecución de penas y medidas de seguridad de Barranquilla, Claribel Onisa Fernández Castellón, fallo que se produjo luego de que el contratista fuera recapturado en una clínica de la capital del Atlántico.
La determinación judicial ha generado fuerte controversia, especialmente porque la misma jueza ya le había concedido un beneficio similar en abril de este año, lo que derivó en la apertura de una investigación disciplinaria en su contra. Tras la más reciente decisión, se conoció que las autoridades competentes adelantan nuevas indagaciones para establecer si existieron irregularidades en la concesión de la libertad condicional.
Los antecedentes judiciales de Emilio Tapia, condenado por escándalos de alto impacto como el caso de Centros Poblados y el carrusel de la contratación en Bogotá, han intensificado el debate público y político sobre las decisiones judiciales que han permitido su salida de prisión y el manejo de beneficios penales en casos de corrupción.