Presidente de Corea del Sur destituido tras intento fallido de instaurar ley marcial
El presidente de Corea del Sur, Yoon Suk Yeol, sufrió una derrota política significativa después de intentar tomar el control del país mediante un decreto de ley marcial el 3 de diciembre, por primera vez en 45 años. El mandatario alegó frustración por la obstrucción de su agenda en el Parlamento, pero su acción provocó un caos que terminó en su destitución. La Asamblea Nacional votó a favor de su suspensión el sábado, con varios miembros de su propio partido uniéndose a la oposición en su contra.
La propuesta de destituir a Yoon generó fuertes protestas en las calles, que rápidamente se convirtieron en celebraciones tras la votación. La popularidad de Yoon había caído drásticamente debido a escándalos políticos y enfrentamientos con el Parlamento. Su intento de instaurar un mandato militar exacerbó aún más la polarización política del país, lo que llevó a su destitución temporal.
Ahora apartado del poder, Yoon ha prometido recurrir a los tribunales para recuperar su puesto, mientras enfrenta una posible acusación penal por insurrección. El Tribunal Constitucional de Corea del Sur tomará la decisión final sobre su futuro, lo que podría resultar en una nueva elección presidencial si se confirma su destitución formal en los próximos seis meses.
Mientras tanto, el primer ministro Han Duck-soo asume el liderazgo interino del país. Sin embargo, debido a su posición no electa, su poder político es limitado, lo que deja a Corea del Sur en una situación incierta en medio de desafíos internos, como la creciente amenaza nuclear de Corea del Norte y la inestabilidad internacional derivada de la posible reelección de Donald Trump en Estados Unidos.
