Biofílica: el emprendimiento caleño que es tendencia por reutilizar materiales de construcción

Si se habla de la palabra amor como sinónimo se podría hablar del sentimiento que le pone Marcela Salcedo a Biofílica , un emprendimiento que se hace cada vez más conocido en el país por la reutilización de materiales de construcción en espacios interiores.
La joven es una arquitecta caleña que se declara todos los días como una ferviente amante del mundo vegetal y el medioambiente, por lo que unió sus pasiones para ayudar al mundo con un toque de elegancia.
Utilizando varillas, retazos de madera y metales desechados, la joven deja fluir toda su creatividad para crear elementos únicos que ya son apetecidos en toda Colombia.
“Empecé a inicios de la pandemia con kits de plantas útiles y una inversión de 500.000 pesos. Actualmente, el proyecto se ha logrado diversificar con la creación de elementos de diseño con vegetación, mobiliario, y trabajos de paisajismo a locales comerciales e ideas personales”, precisó Salcedo.
La joven, de 28 años de edad, afirmó que su proyecto es una “propuesta del buen vivir”, ya que no todos los días explora nuevas estrategias para que las personas puedan tener en sus negocios y hogares elementos cargados de naturaleza y creatividad.
“En Biofílica consideramos innovador darle valor a elementos y materiales reusados o cotidianos empleándolos de formas no convencionales y en relación utilitaria con las plantas como parte clave de nuestro conjunto de diseño”, puntualizó Marcela.
“Nuestros productos son de ediciones limitadas, pues cada elemento hecho nunca será igual al otro ya que se hacen con materiales reutilizados que no se vuelven a encontrar o con diferentes plantas, elementos vivos que tienen su propia personalidad y características singulares”, indicó la joven.
Marcela insistió que una de sus premisas es posibilitar la visibilidad del trabajo local haciendo los procesos en conjunto de artesanos y pequeños creadores de la zona para poder llegar a más personas su amplia experiencia y valor.
“Al encontrarme inmersa en el mundo de la construcción, decidí emplear materiales considerados como ‘chatarra’ o sobrantes de obra que quedan en lugares de trabajo, y así, además de generar un menor impacto al medio ambiente, se pueden reducir costos y emplear dichos elementos en ideas creativas”, insistió la emprendedora caleña.
Para poder crear cada una de sus obras, la joven utiliza herramientas pesadas, muchas de ellas de difícil manejo, por lo que los maestros de construcción se muestran admirados por su destreza.
Tomado de: Blu Radio.