Comunidades indígenas ubicadas en el sector de La Florida retornaron a sus territorios

Durante toda la noche del martes y la madrugada del miércoles, la Secretaría de Gobierno coordinó el tercer traslado de más de 350 personas Embera que estaban asentadas en la UPI la Florida hacia sus territorios de origen.
Un total de 361 indígenas viajaron a la vereda Dokabú, de Pueblo Rico en Risaralda, y a Bagadó y Carmen de Atrato en Chocó, donde las autoridades ancestrales harán el respectivo acompañamiento.
“El retorno es la manera mediante la cual podemos avanzar en la reparación de los pueblos. En su territorio es donde la comunidad puede desarrollarse de manera integral en clave de garantías de no repetición. Esperamos que el Gobierno Nacional, que asumió su compromiso con líderes y lideresas de la población Embera, cumpla con garantizar las condiciones dignas en el territorio”, señaló Vladimir Rodríguez, alto consejero de Paz, Víctimas y Reconciliación.
Para el regreso seguro de estas comunidades, el Distrito se encargó de proveer “12 buses de transporte, cinco camiones con 40 toneladas de enseres que fueron enviados al territorio entre lunes en la tarde y martes en la mañana, y brindó la alimentación para toda la comunidad. Previo al viaje, la Secretaría de Salud realizó valoración médica para confirmar que cada grupo familiar estuviera en buenas condiciones para su retorno”.