Barranquilla dice adiós a Edwin ‘Guayacán’ Madera, leyenda de La Troja
Con palmas, canciones y lágrimas, familiares, amigos y seguidores dieron el último adiós a Edwin ‘Guayacán’ Madera, mánager y propietario del emblemático estadero La Troja, reconocido como el “templo de la salsa” en Barranquilla. El sepelio se realizó este martes en el Cementerio Jardines de la Eternidad del Norte, sobre la Vía al Mar, donde una multitud se congregó para despedirlo.
Mientras el féretro avanzaba hacia la capilla, decenas de voces entonaron al unísono: “La clave y el bongó / La llevo en el corazón”, acompañadas por palmas. Así, los asistentes rindieron homenaje al hombre que durante décadas fue sinónimo de salsa y alegría en la capital del Atlántico.
La asistencia al sepelio fue masiva, y muchos de los presentes portaban camisetas, gorras y objetos alusivos a La Troja. Entre ellos estuvo Ana Milé, una de las nueve hijas de Madera, quien agradeció las muestras de cariño y destacó el legado de su padre. “Muy agradecida por tantas personas que han venido a estar acá, acompañándonos como familia, y darnos cuenta de que La Troja definitivamente nunca fue solamente de nosotros, sino que era de la ciudad”, afirmó conmovida.
Pasadas las cinco de la tarde, el sonido de las palmas volvió a marcar la clave en el camposanto, en una emotiva despedida que recordó al hombre que convirtió La Troja en un ícono de la cultura barranquillera.
Con su alegría y pasión por la salsa, Edwin ‘Guayacán’ Madera deja una huella imborrable en el corazón salsero de la ciudad.
