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Junior rescató un empate en casa frente a Santa Fe y Arturo Reyes sigue en la cuerda floja

'Los tiburones' siguen sin poder poder sumar de 3 en casa

La situación en Junior de Barranquilla se agrava con cada partido. El empate 1-1 ante Independiente Santa Fe, anoche en el estadio Metropolitano, dejó al equipo y a su técnico, Arturo Reyes, en una situación insostenible. El ambiente en el estadio era tenso, con la hinchada manifestando su descontento antes, durante y después del encuentro. Reyes, quien no ha logrado encontrar la fórmula para mejorar el rendimiento del equipo, se llevó la peor parte de los reclamos.

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El partido comenzó con un Santa Fe incómodo para Junior, presionando y dificultando la salida del equipo local. Ni Didier Moreno ni Andrés Colorado lograban generar juego, y ‘Cariaco’ González, constantemente marcado, no conseguía aportar. La falta de movilidad y temor al choque de González lo hacían inefectivo, mientras que José Enamorado y Jhon Lerma intentaban sin éxito crear peligro por la derecha. Junior se veía estacionado, sin ideas ni espacio para profundizar, mientras que Santa Fe, bien ordenado, no cedía terreno.

Santa Fe logró abrir el marcador al minuto 26, cuando Edward López, tras un error en la defensa de Junior, definió con un remate rasante que venció al portero Santiago Mele. Con el gol, la hinchada de Junior explotó en protestas, exigiendo la salida de Reyes con cánticos que resonaban en todo el estadio. A pesar de la desventaja, Junior no encontraba respuestas en el campo, y la desesperación se hacía palpable en las gradas.

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En el segundo tiempo, Arturo Reyes intentó cambiar la dinámica del partido con los ingresos de Víctor Cantillo y Castrillón, lo que trajo una leve mejoría en la elaboración del juego. Junior tuvo una oportunidad cuando Chará provocó la expulsión de Edward López, dejando a Santa Fe con 10 hombres. Sin embargo, a pesar de la ventaja numérica, Junior seguía siendo impreciso y no lograba superar a un rival combativo que, a pesar de la inferioridad, se defendió con firmeza bajo las órdenes de su técnico, Pablo Peirano.

El empate llegó a los 81 minutos por medio de un penalti convertido por Andrés ‘Tití’ Rodríguez, pero fue insuficiente para cambiar la narrativa del partido. La hinchada, que por momentos dejó de protestar para apoyar a su equipo, volvió a expresar su frustración al finalizar el encuentro. La situación de Arturo Reyes se complica aún más, con un equipo que sigue sin mostrar mejoría, sumido en una crisis de resultados y con una afición que pide cambios urgentes.

 

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