Defensoría del Pueblo regional Córdoba estrena sede
Ubicada en el barrio Costa de Oro en Montería, la edificación de 3000 m² cuenta con amplios espacios para la atención de quienes buscan asesoría en la salvaguarda de sus derechos. Adicionalmente, cumple con la normativa sismorresistente y un enfoque en sostenibilidad, ya que cuenta con paneles solares que alcanzan el 30% de producción de energía.
La nueva sede de la Regional Córdoba de la Defensoría del Pueblo es la más reciente muestra de que la entidad continúa concentrando esfuerzos para crecer y así ofrecer una mejor oferta en la promoción, defensa y garantía de los derechos las personas.
En el barrio Costa de Oro en Montería, está un moderno edificio, de más de 3000 m² de espacios diseñados para la atención a los usuarios, el cual representa un avance arquitectónico y un compromiso con la divulgación, protección y promoción de los derechos humanos. Cuenta con ludoteca, biblioteca, sala de lactancia, espacios cómodos para funcionarios y ciudadanos, salas insonorizadas para víctimas, entre otros.
En la ludoteca, niñas y niños podrán jugar y aprender en un ambiente seguro mientras sus padres reciben atención; la biblioteca, al servicio de la comunidad, es un recurso para la consulta y el estudio de material relacionado con los derechos humanos; en la sala de lactancia, las madres podrán alimentar a sus bebés; los espacios amplios para funcionarios y usuarios aseguran la comodidad y eficiencia en la atención.
Las salas insonorizadas para población víctima están destinadas a brindarles privacidad y seguridad a las víctimas, permitiéndoles expresar sus relatos sin miedo a ser escuchadas por terceros; el auditorio está destinado para eventos, conferencias y talleres, promoviendo la educación y sensibilización sobre DD. HH.
También cuenta con amplias zonas de parqueaderos para trabajadores de la institución y usuarios, así como con ascensores para población en condición de discapacidad y la debida señalización en sistema braille para personas con discapacidad visual.
La sede de la Regional Córdoba, con tres plantas, cumple con la normativa sismorresistente y un enfoque en sostenibilidad y cuidado del medioambiente, pues tiene paneles solares cuya eficiencia de conversión de luz natural a energía utilizable alcanza el 30%.
El compromiso de la Alcaldía de Montería con la Defensoría del Pueblo en la capital del departamento se vio reflejado con la donación del lote donde fue construida la sede y la pavimentación de las calles aledañas, lo cual mejora la llegada de las personas al lugar. Su colaboración es sinónimo de la contribución al fortalecimiento de la institución que propende por la garantía de los derechos de las y los ciudadanos.
El arte como contador de la historia de los DD. HH.
El edificio contará con el mural ‘Historia de los Derechos Humanos’, obra del maestro Adriano Ríos Sossa. Con siete metros de largo por dos de alto, la obra narra la evolución de los derechos a lo largo de los siglos, comenzando desde el hombre de las cavernas hasta llegar a los tiempos modernos. Invita al espectador a reflexionar sobre los hitos más relevantes en la lucha por la justicia y la igualdad.
La creación de Ríos destaca por su imponente tamaño y capacidad de comunicación, ya que tiene un lenguaje que elimina barreras y se lee como si fuera un libro, además de que recuerda figuras claves en la historia de los derechos humanos, como Ciro el Grande, primer gobernante en instaurar leyes que respetaran la vida y la libertad de los ciudadanos, y San Pedro Claver, considerado el primer defensor de los derechos humanos en Colombia.
El mural —punto central de ‘Yo Defiendo’, tercera exposición del Museo de Derechos Humanos de la Defensoría— es un llamado a la acción de defensoras, defensores, institucionalidad pública y privada, de toda la sociedad.
El Árbol de los Derechos
La sede de la Regional Córdoba también contará con la obra ‘El Árbol de los Derechos’, del maestro Ríos Sossa. Hecha en el exterior del edificio, transmite un mensaje profundo: fortaleza, amparo, crecimiento y unidad en la lucha por la justicia e igualdad.
Sus ramas evocan un abrazo de solidaridad, mientras que cada hoja honra a un líder de derechos humanos cuyo legado sigue siendo un faro de esperanza y cambio en el mundo. Es un tributo a quienes han dedicado sus vidas a la causa de los derechos humanos, recordando que, al igual que un árbol, deben ser cuidados y protegidos para seguir floreciendo.
Como parte de la exposición ‘Yo Defiendo’, a realizarse en colaboración con la Corporación de Ciencia y Tecnología Maloka y el apoyo del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), ‘El Árbol’, basado en una bonga, especie nativa de la región, es el corazón de una iniciativa que busca resaltar la importancia de los derechos en la vida de todos los ciudadanos.
