Montería

Permiso para atracción mecánica deja sin cancha a más de 100 niños

En el barrio Cantaclaro sexta etapa, una situación ha generado gran controversia y preocupación.

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Alrededor de 100 niños de la Comuna 6 se han quedado sin su lugar habitual de entrenamiento deportivo debido a la instalación de una atracción mecánica en el lote contiguo al Hospital de la zona. Esta decisión ha afectado directamente a la escuela deportiva CFC que utilizaba el terreno para sus actividades, dejando a los jóvenes sin un espacio adecuado para practicar su deporte favorito.

La polémica se originó cuando una empresa de atracciones mecánicas comenzó a instalar sus vehículos dobletroques para descargar lo que se ha denominado una “ciudad de hierro”, instalación que ha ocupado el terreno donde la escuela de fútbol realizaba sus entrenamientos diarios, interrumpiendo de manera abrupta las actividades de los niños que, hasta ahora, habían utilizado este espacio de manera regular y sin inconvenientes.

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La decisión de alquilar el terreno a la empresa de atracciones, al parecer fue tomada por los presidentes y miembros de las Juntas de Acción Comunal (JAC) del sector, quienes aparentemente no consultaron ni tuvieron en cuenta a la escuela de fútbol ni a las familias de los niños que allí entrenan. Esta falta de consideración ha generado indignación entre los padres, entrenadores y la comunidad en general, que ven en esta acción una muestra de negligencia y falta de planificación.

Para los más de 100 niños afectados, el deporte no solo representa una actividad recreativa, sino también una herramienta fundamental para su desarrollo físico y emocional. La pérdida de su espacio de entrenamiento podría tener consecuencias negativas en su bienestar y en su desarrollo deportivo.

Ante la situación la comunidad ha expresado su malestar a través de diversas plataformas y ha convocado reuniones para buscar soluciones a esta problemática. “Es inaceptable que se prioricen intereses comerciales sobre el bienestar de nuestros hijos. Este terreno era un lugar seguro donde podían practicar deporte y mantenerse alejados de otros peligros”, manifestó uno de los padres afectados.

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Por lo anterior los afectados están exigiendo que se revierta la decisión de alquilar el terreno a la empresa de atracciones mecánicas y que se restituya el espacio para uso deportivo. También se está solicitando a las autoridades locales que intervengan para mediar en este conflicto y se busque una solución que no perjudique a los niños.

Algunas de las alternativas propuestas incluyen la reubicación del parque de atracciones en otro terreno que no afecte las actividades deportivas de los niños o la búsqueda de un nuevo espacio para la escuela de fútbol que sea adecuado y seguro para sus entrenamientos.

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