Haití en crisis a punto de una “guerra civil”

El presidente de la Conferencia Episcopal de Haití, Max Leroy Mésidor, ha emitido un comunicado alarmante en el que alerta sobre la creciente amenaza de una guerra civil en el país caribeño. Mientras las bandas controlan las calles y la seguridad se deteriora, Mésidor advierte que las fuerzas de policía haitianas se muestran impotentes frente a bandas armadas que actúan como ejércitos organizados.
El arzobispo de Puerto Príncipe también ha señalado que la Iglesia católica se ha convertido en objetivo de las bandas criminales, siendo víctima de secuestros y ataques. La situación ha llegado a un punto crítico donde incluso los obispos haitianos se ven amenazados, especialmente en zonas controladas por las bandas.

Mésidor ha destacado que las vías principales de la capital, Puerto Príncipe, están controladas por estas bandas, lo que dificulta enormemente el trabajo de la Iglesia y otras instituciones. La inseguridad ha llegado a tal punto que el propio Mésidor ha admitido no poder visitar gran parte de su diócesis debido a las carreteras bloqueadas.
A pesar de las adversidades, la Iglesia haitiana continúa su labor con una resistencia ejemplar, buscando mantener viva la esperanza en medio de la crisis. Sin embargo, la situación política en Haití sigue siendo delicada, con el presidente de turno de Caricom, Irfaan Ali, liderando esfuerzos para promover el diálogo político y buscar una solución a la crisis.
Este lunes, líderes de la Comunidad del Caribe (Caricom), junto con representantes de Estados Unidos, México, la ONU, Francia y Canadá, se reunirán en Jamaica para discutir posibles medidas que puedan ayudar a Haití a superar la crisis. Entre las propuestas se encuentra la creación de un consejo presidencial independiente y la implementación de una Misión Multinacional de Apoyo a la Seguridad para abordar la crisis de seguridad actual.
A pesar de estos esfuerzos, el camino hacia una solución política en Haití sigue siendo incierto, especialmente después de que el primer ministro haitiano, Ariel Henry, se comprometiera a celebrar elecciones antes de finales de agosto de 2025, una fecha que muchos consideran demasiado lejana dados los desafíos actuales que enfrenta el país.