Cuatro cuadras le faltaban a Amed Marimón Barrios para llegar a su casa en el barrio Henequén, sector Nueva Jerusalén,en Cartagena, pero un contundente golpe lo hizo caer y quedar inconsciente. Lo encontraron muerto a las 9 de la noche de ayer domingo.
La trágica noticia fue desconocida para su esposa, Candi Hernández, hasta horas después. No sabe con exactitud cómo ocurrió el asesinato pero por cómo encontraron al hombre intuye que se dio en medio de un atraco.
“Estaba boca abajo, con los bolsillos afuera y sin su cartera. Al parecer recibió un golpe con un objeto contundente y murió de inmediato”, narra la mujer y lamenta el actuar de los delincuentes y la poca reacción de las autoridades: “Varios policías llegaron, me dieron un número al que me debía comunicar si sabía de algo, pero no hicieron más”.
Candi reconoce que su esposo “era un buen hombre, sano, trabajador y muy querido en la comunidad”, a la que llegó hace casi dos años.
“Él salía a trabajar y acostumbraba a regresar temprano. Así lo hizo en la tarde del domingo, se fue a las 5 de la tarde a laborar como albañil y me dijo que volvería lo más pronto”. Amed pretendía regresar temprano como se lo prometió a su esposa, pero el golpe que recibió lo mató en el acto.
La Policía no se ha pronunciado sobre el homicidio del hombre, de 42 años, que dejó dos hijos pequeños, de 9 y 13 años. Su familia espera que no quede en la impunidad y se logre esclarecer.
Tomado de : El Universal